Es barato de producir, se puede moldear en cualquier forma, es ligero y seguro de usar. Si se desecha correctamente, el plástico se puede recuperar, reabastecer y reutilizar, ya sea como nuevo embalaje u otros usos, como fibras y tela. Esto lo convierte en un material renovable. El plástico reciclado también utiliza un 60% menos de energía que el plástico nuevo para producir, de modo que ...